Y Alcalá de inundó de Esperanza
Desafiando a la lluvia la Hermandad del Cautivo decidió finalmente hacer estación de penitencia, lo hizo con la idea de recortar de su recorrido y estuvo arropado por cientos de fieles que no dudaron en echarse a la calle para ver a dos de las imágenes que más devoción despiertan en la ciudad.
Puntual en su temprana salida, y bajo un centro engalanado y repleto de público ambos pasos avanzaron por las calles muy pocos metros ya que empezó a llover a eso de las 21.30 horas. Todo hacía presagiar que volverían a su templo pronto y así lo hicieron, cuando llegaron a la Plazuela encararon de nuevo hacia su templo ya que la lluvia se hizo más intensa.