TU FARMACÉUTICO AL RESCATE
Si, estamos en guerra.
Y no, no estoy hablando de geopolítica, inmigración ni nada similar, esto es Salud Pública.
Estamos en guerra con las bacterias y la culpa es de la sociedad al completo.
El pasado 16 de septiembre The lancet publicó el estudio GRAM donde gracias a los datos comunicados por 204 países sobre el tratamiento de 11 síndromes infecciosos, 22 patógenos y 84 terapias combinadas, se analiza el impacto de la resistencia antimicrobiana entre 1990 y 2021y se hace la previsión para los próximos 25 años.
Se ha demostrado objetivamente que la Resistencia a antibióticos (RAM) es un problema enorme para los sistemas sanitarios y que es muy probable que hasta el próximo 2050 se produzcan cerca de 40 millones de muertes asociadas directamente al fallo de los tratamiento antimicrobianos por resistencias. Si consultamos los datos de la SEIMC (Sociedad Española de Microbiología y Enfermedades infecciosas), podemos observar que actualmente ya hay 20 veces más muertes en España por RAM que por accidentes de tráfico.
Este problema no es nuevo, venimos arrastrándolo tras décadas de un uso erróneo de los antibióticos. Hemos asistido como sociedad a la banalización del uso de los antimicrobianos usándolos en patologías víricas, incumpliendo posologías, dejando tratamientos a medio terminar “porque ya estoy mejor”, usándolos para un mejor engorde del ganado de carne, tratando de forma indiscriminada los bebederos de las aves para prevención de enfermedades y un largo etcétera de casos que nuestra inconsciencia como sociedad avanzada y sin miras de futuro nos ha permitido.
Y ahora, tenemos en escena un nuevo enemigo, las superbacterias. No estamos hablando de bacterias con capa y antifaz sino de especies de bacterias que han aprendido a que los antibióticos no les hagan ni cosquillas. Entre ellas, una de las más peligrosas es el Staphylococcus aureus que en 2021 estuvo presente en 550.000 muertes, de las cualescausó 130.000 de forma directa.
Todo esto sumado a que llevamos años sin desarrollo de nuevos antibióticos eficaces. Desde 2017 se han aprobado doce antibióticos, diez de los cuales ya presentan resistencias. Y es un camino de entre 10 y 15 años el llegar a aprobar un nuevo fármaco.
¿Y ahora, qué?
Pues como pacientes, pero sobre todo como sociedad, debemos ser conscientes del uso responsable de los antimicrobianos, lo cual incluye medidas de diferente naturaleza. Debemos empezar desde la higiene personal, el correcto saneamiento y el fortalecimiento de las coberturas vacunales que prevengan la enfermedad.
En el caso de que esta prevención no sea suficiente o no sean un limitante de contagio, el criterio médico debe prevalecer siempre en la toma de decisiones y debemos seguir las indicaciones de nuestro médico, enfermero o farmacéutico a la hora de completar nuestro tratamiento, respetando las posologías y los días de tratamiento y evitando algo muy común que es el aprovechamiento de restos de tratamientos anteriores para iniciar una automedicación irresponsable. Mi consejo es desechar siempre esos restos en el punto SIGRE de nuestra farmacia de confianza para no caer en la tentación.
Estamos hablando de personas, pero es igualmente importante seguir las mismas pautas en el caso de los animales, donde existe un enorme descontrol del uso de los antibióticos que se ha perpetuado desde hace décadas y que poco a poco vamos revirtiendo. Siga solo los tratamientos prescritos por su veterinario y evite la automedicación animal o las recomendaciones entre compañeros, es por el bien de todos.
Ilustración 1 Muertes atribuibles y asociadas a la resistencia a los antimicrobianos, por grupo de edad detallado, para 1990 y 2021
La OMS alerta de que el desarrollo de nuevos antibióticos está “estancado” | Noticias ONU (un.org)
ANTONIO HOYS
Farmacéutico
Excelente artículo sobre uno de los problemas más importantes de salud pública que acecha el segundo cuarto del siglo XXI. Muy claro y conciso. Enhorabuena, compañero!