Indignación ciudadana por la falta de aire acondicionado en los autobuses urbanos
La situación se repite cada verano y afecta sobre todo a personas mayores y estudiantes.
Los usuarios de los autobuses urbanos han vuelto a alzar la voz ante una situación que se repite año tras año y que se vuelve insostenible con la llegada del calor. A pesar de las altas temperaturas, muchos de los vehículos circulan sin encender el aire acondicionado, lo que convierte cada trayecto en una experiencia sofocante para cientos de personas, especialmente mayores y jóvenes que se desplazan diariamente a centros educativos.
Con previsiones que apuntan a más de 30 grados en los próximos días, los pasajeros temen que el problema se agrave aún más. “Nos estamos asfixiando”, comenta una usuaria habitual de 74 años. “Y lo peor es que esto ya pasó el verano pasado y no se ha hecho nada por evitarlo”.
Según algunos conductores, la falta de refrigeración no es casual. Al parecer, los autobuses propulsados por gas pierden fuerza cuando se activa el aire acondicionado, lo que ha llevado a que, en muchos casos, se evite su uso para no comprometer el rendimiento del motor. Sin embargo, para los pasajeros esta explicación no es suficiente: “Si el sistema no permite dar un servicio digno, entonces hay que cambiarlo”, afirma indignado un joven que viaja cada día al instituto.
Los ciudadanos exigen soluciones urgentes por parte del Ayuntamiento y la empresa concesionaria del transporte. La activación del aire acondicionado no debería ser una opción, sino una obligación en pleno siglo XXI y con temperaturas extremas cada vez más frecuentes debido al cambio climático.