Es lamentable el estado en que se encuentran las principales fuentes de la ciudad después de que el equipo de Gobierno haya tomado la deliberación de prescindir del agua en las fuentes, lo que daña y empobrece la imagen de Alcalá de Guadaíra.
Son muchas las fuentes que han desaparecido, empezando por la de La Plazuela y continuando por la del Barrero, todas se han convertido en maceteros. Queremos recordar al equipo de gobierno que los sistemas de circuito cerrado no suponen un gasto de agua, ya que permiten reutilizar permanentemente el mismo agua y de paso, recordamos también la escasez de fuentes públicas para beber en la ciudad (la del parque infantil de Oromana tampoco funciona).
Esta circunstancia se observa en fuentes principales del municipio, tales como la de Rabesa, una fuente que es además la primera imagen que un turista se queda al entrar en la ciudad. Para colmo, y debido a que está sin agua, las pequeñas teselas de azulejos de adornan la fuente se están desprendiendo.
Una imagen pobre la que se está dando y que se extiende a fuentes de otras zonas. De hecho, es lamentable que el principal parque de la ciudad, el Parque Centro, tenga sin funcionamiento la casi totalidad de las fuentes y que los ciudadanos y ciudadanas se encuentren con un espacio público tan importante en tan lamentables condiciones, especialmente ahora con 40 grados que las fuentes refrescan bastante. Para colmo, nos informan que al estar vacías no dejan de acumular basuras.
