Los padres del CEIP Blas Infante llevan ventiladores, a las aulas pese a la inversión municipal anunciada de 700.000 euros.
Mientras el Ayuntamiento ha anunciado recientemente una inversión de 700.000 euros en el arreglo de los colegios públicos de la ciudad, las familias del alumnado de primero de Primaria del CEIP Blas Infante denuncian que han tenido que llevar ventiladores de casa para hacer frente a las altas temperaturas en las aulas.
“Es indignante que tengamos que ser los padres quienes proporcionemos ventiladores para que nuestros hijos puedan soportar la calor de estos días”, critican.
Los progenitores aseguran que comprenden que puedan producirse desperfectos técnicos, pero reclaman que se dé prioridad a su reparación o sustitución, o bien que se adopten medidas provisionales que garanticen un ambiente escolar seguro.
Respuesta municipal
El delegado municipal de Educación, Pablo Chaín, ha respondido a los padres explicando que «es totalmente cierto que en estos días de fuerte subida de las temperaturas los centros educativos sufren las incomodidades que desde las diferentes administraciones estamos empeñados en paliar, especialmente en esta escalada acelerada de días de extremo calor, que atribuyen al cambio climático». Indica además, que desde el Ayuntamiento Alcalá de Guadaíra «conocemos las necesidades de los CEIPs con fuertes inversiones priorizando las sombras y la climatización en los centros». En el caso concreto del CEIP Blas Infante indica que «están todos los sistemas de climatización en buen mantenimiento y funcionando, aunque conocemos que siguen siendo necesarias más inversiones que regulen las temperaturas en olas de calor». Tambien anuncia para este centro «un proyecto de inversión prevista en los próximos meses que supera los 50.000 € en base a las prioridades marcadas por su equipo directivo y AMPA, que se sumarán a las inversiones de los últimos años, entre las que se incluyen las pérgolas de sombra en los corralitos de infantil».
Calor excesivo
Los padres nos indican que las temperaturas que se están registrando estos días convierten las aulas en espacios poco adecuados para el aprendizaje y la salud: “El calor excesivo genera incomodidad, cansancio, falta de concentración e incluso puede provocar mareos o malestar físico en los estudiantes”.
Las familias reivindican un entorno sano y seguro para los niños y niñas, y piden con urgencia mejorar la climatización en muchos centros educativos: “Estamos indignados ante las altas temperaturas que sufren nuestros hijos. ¿¡Hasta cuándo!?”, concluyen bajo el lema #AulasSeguras.