Hernán Cortés, tras la huelga de hambre, continúa en paro
Hernán Cortés, el hombre que permaneció en huelga de hambre durante casi 15 días, continúa en paro. No ha cumplido así con su promesa el Ayuntamiento alcalareño que vendió a bombo y platillo, incluso a las televisiones que vinieron para hacerse eco del caso de Hernán, que ofrecía dos meses de empleo (PEUM. Plan de Emergencia Municipal) a este alcalareño. Hoy hemos podido comprobar que sigue sin empleo
Alcalá Información ha hablado hoy con Silvia, una compañera, quien nos ha confirmado que su situación sigue siendo la misma «no tiene trabajo y está aun peor que cuando comenzó la huelga». Hernán se recupera de sus heridas, las que se causó en su desesperación y las heridas del corazón más difíciles de superar. Y es que su sufrimiento no sirvió de nada. Hoy sigue sin empleo y sin vivienda.
Nos comenta además Silvia que distintas fuentes municipales están asegurando que le han dado empleo y vivienda a la familia y que esto es «absolutamente falso».
«Después de 15 días de huelga hemos podido comprobar que los alcalareños estamos desprotegidos y olvidados por nuestros gobernantes del PSOE», asegura la esposa de Hernán.
Hernán es ya, además de una persona querida y entrañable, la imagen de la precariedad y la pobreza en Alcalá de Guadaíra. Es una muestra más que evidente del fracaso de las políticas de empleo y de servicios sociales, que solo consiguen paliar algunos de los casos más extremos, pero que dejan a la gran mayoría en una situación insostenible. En Alcalá hay 38 personas de cada 100 viviendo bajo el umbral de la pobreza (la segunda ciudad de España con mayor tasa de pobreza después de Sanlucar de Barrameda)
El grave caso de Hernán
Hernán, después de sufrir un desahucio tuvo que recurrir a los Servicios Sociales del municipio que desde el año 2004 le ha tramitado distintas ayudas y solicitudes de programas de “solidaridad” para erradicar la marginación, como el salario social. Durante un tiempo su familia ha tenido como único ingreso la llamada Renta Activa de insersión (430 euros al mes y por 11 meses), y ha trabajado solo 16 días en los últimos 4 años. Su situación es tan precaria que decidió ponerse en huelga de hambre ante a puerta del Ayuntamiento. Tras casi 15 días sin ingerir ningún tipo de alimento, Hernán acabó autolesionándose en un intento por acabar con su vida.
Hoy un mes después sigue sin empleo.
