Quedan aplazados los exámenes de Selectividad
La Evaluación de Bachillerato de Acceso a la Universidad (EBAU), conocida antes como Selectividad, se mantiene este curso 2019-20 a pesar del parón de las clases presenciales en todos los centros por el coronavirus, pero se aplazan las fechas de su convocatoria.
Es la decisión a la que han llegado este martes los ministerios de Educación y Universidades junto con los responsables educativos de las comunidades autónomas y los rectores, que han mantenido una reunión de forma telemática durante casi seis horas.
Desde el pasado mes de enero estaba previsto que este curso la EBAU (en algunas comunidades se denomina EVAU) se tenía que celebrar antes del 18 de junio y las pruebas extraordinarias, es decir la segunda oportunidad para aprobar, antes del 10 de julio o del 16 de septiembre, dependiendo si se celebra en un mes u en otro en las distintas autonomías.
Los 217.000 estudiantes de 2º de Bachillerato que este año se presentan a la convocatoria ordinaria de la Selectividad están en vilo por lo que va a pasar con la evaluación.
«Ningún estudiante va a perder el curso por la suspensión de las clases presenciales» es el mensaje tranquilizador que ha tratado de dar hoy el Gobierno.
Se ha descartado suspenderla, como reclamaban algunos estudiantes, pero no se sabe cuándo va a tener lugar porque «depende de la duración del estado de alarma o de la suspensión de los espacios educativos», han indicado fuentes del Ministerio de Universidades. El Gobierno «baraja varios escenarios temporales» y tomará una decisión en función de cómo evoluciona la pandemia.
También se adaptarán los calendarios de matrícula para el próximo curso de acuerdo con las nuevas fechas y se flexibilizarán para «garantizar que el acceso se produzca en términos de equidad y justicia para todos».
Reducir temario o no examinar de todo
Algunas de las propuestas que se han planteado estos días han sido reducir el temario de la Selectividad y no examinar de los contenidos que no hayan sido impartidos (lo ha planteado el sindicato Anpe) o recuperar las clases a final de curso (lo piden los padres de la Ceapa). La patronal de enseñanza privada Cicae reclama, por su parte, aumentar dos semanas el curso escolar, que ahora termina en mayo, mientras que el Sindicato de Estudiantes quiere que no haya prueba este año y que la nota media del Bachillerato se convierta en la nota de corte para acceder a la Universidad (ahora cuenta un 60%)..
Además, hay que adaptar el calendario de apertura del periodo para la matrícula universitaria al de la EBAU.
Según el proyecto sobre la EBAU para este curso del Ministerio de Educación, además de las fechas antes citadas, se fijaba que no habría cambios significativos respecto al curso anterior, es decir, la calificación se sigue calculando entre el 40 % del resultado de la prueba y el 60 % de la calificación final de la etapa.
El aplazamiento de la EBAU era una de las peticiones del alumnado por el coronavirus, como ha señalado en una nota la Confederación estatal de Asociaciones de Estudiantes (Canae), que reconoce la «incertidumbre» especial entre aquellos que deben enfrentarse a la prueba de acceso a la universidad.
Por otra parte, el Ministerio de Educación ha puesto a disposición de las autonomías y de la comunidad educativa en su conjunto todos los recursos digitales disponibles y está trabajando en otras iniciativas que permitan reducir la brecha digital entre los alumnos con menos recursos.