Más de un lustro de retraso
Los primeros anuncios sobre la construcción de la futura Casa de la Juventud los hizo, en mayo del 2018, la actual alcaldesa junto al entones delegado de Juventud, Casimiro Pando. Desde entonces se han hecho muchas promesas, se han dado muchos plazos e incluso se han realizado dos proyectos para este edificio.
Tanta ha sido la tardanza que muchos los llaman ya el proyecto “fake” de este gobierno municipal. Unas obras que nos lleva prometiendo la alcaldesa desde hace más de un lustro, y que son un claro ejemplo de la propaganda y el marketing políticos al que nos tiene acostumbrados este equipo de gobierno. (Puede ver la noticia en este enlace de Alcalá Información ).
Ayer por fin se puso la primera piedra. Esperemos que esta no quede como otras muchas obras en Alcalá, que no han avanzado (recordemos las viviendas de Santa Lucía o el Centro de Interpretación en el castillo).
El nuevo edificio, tarde pero necesario
La construcción de este edificio sigue a la demolición del antiguo mercado de abastos y que ha permitido contar con una parcela en pleno centro de la localidad, con 1.800 metros cuadrados.
Por un lado crea una zona de dotaciones, con capacidad para el desarrollo de actividades formativas y culturales; crea una bolsa de aparcamientos en el centro con lo que atiende una demanda ciudadana. Y de paso, facilita el acceso los establecimientos comerciales que hay en el entorno.
El proyecto contempla la creación de dos plazas a diferentes alturas para salvar la diferencia de cota entre las calle Madueño de los Aires y Don Bosco, arboleda y agua. De hecho, una fuente alargada dará la bienvenida desde la calle Madueño de los Aires y el propio edificio.
En la parte baja del inmueble se creará la planta de aparcamientos con 80 plazas y acceso entre las calles Don Bosco y Callejuela del Carmen. El edificio de la Casa de la Juventud se construirá encima. Esta planta alta será un espacio central abierto al público con zonas ajardinadas.
El edificio busca ser lo suficientemente versátil para acoger eventos diversos y actividades culturales, incluso dentro y fuera del mismo a la vez. Estará preparado para acoger aulas formativas, espacios expositivos, locales de ensayo, zona de restauración… La idea es que esté capacitado para responder a las necesidades que los jóvenes requieran.
El presupuesto es de 3,3 millones de euros para un proyecto que está integrado en los objetivos de la estrategia de desarrollo de la Agenda 2030 y que cuenta con financiación de fondos europeos al 75%. (Los alcalareños abonaremos el 25% del coste total del proyecto, más de 825.000 euros).