Felicitamos al Museo de Alcalá de Guadaíra por ganar el premio ‘Patrimonio Industrial’. Pero también lamentamos lo poco que hace este ayuntamiento por poner en valor nuestro patrimonio, pues sus obras de ampliación llevan más de dos años paralizadas.
Es una pena que no se hayan llevado a cabo aun las obras de ampliación paralizadas desde hace más de dos años. De hecho, las ultimas noticias ofrecidas por el consistorio son que el proyecto inicial de obras se tira a la basura para rehacerlo, del mismo modo que se hizo con la Casa de la Juventud (vamos ya por dos proyectos) y que se hará con el Centro de Interpretación del Castillo (paralizado desde hace meses y pendiente también de un nuevo proyecto).
El pasado mes de abril de 2021 el Gobierno municipal daba luz verde al proyecto de ampliación del museo que incorporaba el edificio que sirvió de Comisaría de Policía, con la reurbanización de esa vertiente de la plaza de la Almazara (lea aquí la noticia)
El objetivo es que Museo de Alcalá de Guadaíra sea más grande. El Ayuntamiento daba luz verde al proyecto de ampliación de la instalación expositiva municipal, partiéndose de un presupuesto que rondaba los 390.00 euros.
Sin embargo, el proyecto de ampliación del Museo de Alcalá vuelve al inicio tras dos años paralizado y bloqueado a nivel técnico. Ahora, tras dos años de dejadez, el gobierno ha incluido en el proyecto de presupuestos de 2024 una partida para encargar la redacción de un nuevo proyecto de rehabilitación del edificio anexo.
El anexo de inversiones de las nuevas cuentas municipales recoge una dotación de 39.764 euros en 2023 y 18.149 euros en 2024 para el nuevo diseño.
El museo
El Museo de Alcalá de Guadaíra, abierto al público en 2005, es “buena prueba” de la estrategia de desarrollo local por recuperar y dar uso cultural a cuantos vestigios arquitectónicos quedan en el término municipal de las actividades industriales del pasado. En el caso del museo municipal, este ha sido instalado sobre los vestigios de una antigua refinería que pudo llegar a albergar en sus depósitos subterráneos hasta un millón de kilos de aceite y que dio empleo durante años a cientos de alcalareños.
Eran las instalaciones industriales denominadas MARTÍ Y GUTIÉRREZ, Industrias del Olivo S.A., fundada en 1917, cuya actividad era la de refinería de orujo y fábrica de jabones. Es una de las construcciones que se conservaron y quedaron integradas dentro del Parque Centro, como testigos de su vida anterior y por su capacidad para ser transformadas en nuevos usos.
Buena parte del espacio que ocupaba la antigua fábrica tras el desmantelamiento industrial quedo libre y se transformó en parque durante la década de los noventa, culminando las obras a principios del presente siglo. A continuación, se adaptó la nave de almacenaje como Museo de la Ciudad que quedó inaugurado en 2005.
El edificio de la policía
El edificio que se quiere incorporar al Museo está ubicado junto a lo que fue la antigua entrada de la antigua fábrica y su uso era en planta baja el de oficina y puesto de control de la puerta de acceso. La planta superior contaba con un acceso independiente, ya desparecido, a través de una escalera exterior en el espacio intermedio que lo separa de la nave del actual Museo. A comienzos de los noventa fue sede de la empresa municipal de la vivienda, manteniendo su uso original de oficina.
Posteriormente volvió a estar sin ocupación hasta el traslado provisional de la Comisaría de la Policía Nacional, a principio de los años 2000, que fue su último inquilino hasta que ésta se trasladó a su nueva sede.