Entrevistamos al candidato de Asamblea Alcalá, José Carlos Crespo
José Carlos Crespo es licenciado en historia del Arte y cuenta con una larga trayectoria en en los movimientos sociales de Alcalá. Ha sido empresario en dos negocios de hostelería y ha estado muy implicado en el desarrollo del colectivo Andaluces de Alcalá. Además, es un referente en la Plataforma Salvemos el Guadaíra. Ha sido miembro destacado en la unión local del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT) y de la Asociación ‘Mercao Social’ de Alcalá de Guadaíra.
¿Cómo se produce tu entrada en política?
Tenía necesidad de colaborar socialmente, de hecho siempre he colaborado con Green Peace. Luego entré en el colectivo Andaluces de Alcalá, un proyecto nuevo que empezó a crecer en 2011 queríamos contar con la opinión de la gente, hicimos un acto: ‘Alcalá Habla’ en el que participó mucha gente. Resultó un éxito y repetimos en 2015, luego me he unido a otros muchos movimientos sociales. Hasta que en septiembre decidimos presentarnos a las elecciones.
Asamblea Alcalá es plataforma integrada por distintos colectivos, ¿por qué crees que te designan a tí?
Cuando decidimos presentarnos en septiembre se entendió que yo estaba implicado en varios movimientos sociales, eso unido a que suelo llevarme bien con todo el mundo y tengo más tiempo libre que el resto de mis compañeros. Aunque también es verdad que no me planteo mi entrada en la política a largo plazo. Estaré estos 4 años, luego habrá que dejar paso a gente nueva.
¿Cuáles son vuestras aspiraciones de cara a estos comicios?
Pensamos que podemos entrar a formar parte del equipo de gobierno. Pero somos realistas. Eso sí, sabemos que tenemos una capacidad de trabajo que no tiene otro partido. Llevamos años pateándonos la calle, hemos hecho y hacemos asambleas, hemos organizado concentraciones. Queremos que los vecinos sean activos.
Y ¿cuál crees que es el punto fuerte del equipo que se presenta por Asamblea Alcalá?
La experiencia y que es un equipo muy preparado. Para mí lo importante es la gran capacidad de trabajo que tenemos y sobre todo, la honestidad y las ganas de trabajar de todos los candidatos.
¿Os planteáis una posible coalición para gobernar y, en caso afirmativo, habéis establecido una línea roja?
No apoyaremos ni a PSOE ni a la derecha. Verás, no es una decisión mía lo hemos consensuado en asamblea.
Vuestro programa apuesta por dar voz al ciudadano
Sí, consideramos prioritario activar los consejos sectoriales porque hay que gobernar contando con la opinión de la sociedad civil. Es esencial que creemos consejos de distrito y que las decisiones del pueblo sean vinculantes. Es básico para democratizar el gobierno local, la población tiene derecho a opinar.
Es más, nuestro partido defiende que debemos dar voz ciudadanos y que estos puedan llevar una propuesta al Pleno sin tener que pasar por los partidos políticos.
Además, las asociaciones vecinales deben ser autónomas e independientes y no estar controladas. Ahora, si levantas la voz te quitan la asociación o la subvención para mantenerla.
También hacéis hincapié en los temas sociales
Creemos que las condiciones de vida básicas de las personas deben estar resueltas, por ejemplo la vivienda. Hay que asegurar los necesidades básicas como la energía, el agua, la vivienda y la escolarización.
¿Podrías resumirme los puntos básicos de vuestra candidatura?
En primer lugar es necesaria una auditoría para ver el estado de las cuentas municipales. Consideramos esencial suspender de forma inminente el trato con los bancos que desahucien y finalmente, poner condiciones éticas para todos los cargos públicos, sobre todo en los que se refiere a sueldos, paridad, etc.
Por otra parte, creemos que el gobierno ha abandonado el centro voluntariamente, como ha ocurrido en la Alameda, quieren echar a la gente que no puede vivir ahí y traer a gente que sí. Por eso, consideramos esencial la creación de una empresa dedicada a la vivienda que reforme las casas deshabitadas del centro, las transforme en viviendas y las saque a la venta.
En definitiva…
Queremos darle la vuelta a la política, que la política deje de ser un espectáculo y se haga más política real y sobre todo asegurar las necesidades básicas de las personas.
