AMPLIACIÓN DE LA NOTICIA: Decathlon abrirá mañana con normalidad
La Policía Nacional informaba a las 24.00 horas a este periódico que la situación estaba controlada y que el centro abrirá con normalidad.
El Decathlon de Alcalá de Guadaíra no pasó ayer el mejor de sus días. Sobre las 20.30 horas, una llamada alertaba de un posible artefacto explosivo en el edificio. De inmediato, efectivos de la Policía Nacional se desplazaron hasta el lugar y procedieron al desalojo preventivo de la nave, que quedó completamente desalojada en torno a las 21.30 horas.
Rápidamente se activó el protocolo previsto en estos casos, con el acordonamiento de la zona y una exhaustiva investigación. Alrededor de las doce de la noche concluyó la inspección policial y se confirmó que el aviso era falso, por lo que se levantó el perímetro de seguridad. La Policía Nacional nos informa que el requiso policial fue negativo y que el centro funcionará con normalidad el próximo lunes.
La Policía ha inspeccionado con minuciosidad tanto el edificio como los alrededores. Tras más de 3 horas de intensa búsqueda los agentes no han localizado nada sospechoso, dando por concluida la investigación. El tráfico en la zona fue restringido por completo y la Policía controló el tránsito de vehículos que se arremolinaban en los alrededores para informarse sobre lo que estaba pasando. Mientras tanto, decenas de personas desalojadas se instalaron cerca de la zona a la espera de que se esclareciese lo ocurrido. Muchos de ellos afirmaron haber dejado en el interior del centro comercial todas las compras sin poder pasar por caja.
«Por megafonía avisaron de que debíamos salir y dejarlo todo allí. No tuvimos tiempo de pagar la compra, cerraron las cajas y salimos de allí asustados porque no nos dieron explicaciones. Luego vimos mucha Policía y no sabíamos qué pasaba», nos explica Antonio Gómez, un vecino de Sevilla Este que se encontraba en el edificio cuando lo desalojaron.
Por otra parte, la Policía trabaja para dar con la identidad de la persona que ha dado el falso aviso, al que se le podría atribuir un delito de denuncia falsa recogido en el Código Penal con condenas de entre tres meses y un año de cárcel.
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