Un ejercicio de imaginación: usted está en Alcalá de Guadaíra. Va con su vehículo y llega al cruce del colegio Pedro Gutiérrez, una intersección muy transitada sobre todo en horas punta por el colegio.
De repente, usted que va en su vehículo, ve una rotonda: varios pivotes de plástico y unas señales de tráfico en el centro.
No se sorprenda, no es su imaginación: es la rotonda anunciada hace sólo unos días por el delegado de movilidad, David Delgado. Eso sí, para que no se diga que no hubo esmero, le han pintado alrededor un círculo blanco.
“No se puede improvisar tanto, esto es una cagada, hay que hacer las cosas en serio. Una rotonda de verdad es otra cosa, esto es porque no hay elecciones”, asegura un vecino, Sergio, indignado.
La madre de un alumno del centro educativo de esta plazoleta nos explica que “en la zona hace falta una rotonda o lo que sea para regular el tráfico, pero hay que hacer las cosas en condiciones, esto es de risa”.
El equipo de gobierno, por su parte, explica que si los pivotes van bien, ya construirán una en condiciones para el verano.