Los alumnos del Rodríguez Almodóvar empiezan el curso hacinados

Un curso escolar más y los alumnos del Rodríguez Almodóvar vuelven a empezar el curso hacinados. Llevan años demandando obras de ampliación, pero por el momento, este año los alumnos se verán obligados a empezar el curso en caracolas. Concretamente, otras dos caracolas que se suman a las cuatro que ya existían.

En total seis clases estarán ubicadas en estas aulas prefabricadas. Para colmo y como ya adelantábamos, hace sólo unos días (1 de septiembre) que llegaron las nuevas caracolas y aun no están preparadas, así que los niños han tenido que reagruparse hasta que las dos nuevas estén listas.

Un auténtico desastre según nos comunican los propios padres «nos siguen engañando, nos comenta uno de los padres afectados, siguen sin hacer nada».

El CEIP Rodríguez Almodovar es un centro de infantil, está previsto su conversión en un centro de dos líneas, mientras tanto,  este curso 2018/19 cuenta con seis caracolas y el Aula de Usos Múltiples que también se ha habilitado para albergar dos aulas.

Una de las principales causas de las quejas de los padres ha sido precisamente la ubicación de las nuevas caracolas. Y es que la llegada las aulas prefabricadas ha hecho que el centro se quede casi sin zona de recreo. La solución es alternar las horas del recreo por clases, para que todos los alumnos tengan derecho a su media hora de recreo.

Pero esta situación lo complica todo, hay más dificultades para cuadrar los profesores que vigilen en los recreos y más molestias para los alumnos que dan clase en esta zona, concretamente en el Sala de Usos Múltiples (SUM) habilitada también como aula.

Debido a la falta de espacio estos pequeños han tenido que prescindir de la SUM, de gimnasio, Biblioteca, casi no tienen zonas comunes, ni patio.

Las obras que no llegan

La Consejería de Educación de la Junta anunciaba el pasado mes de julio la licitación de las obras del Colegio Antonio Rodríguez Almodóvar. Trabajos que cuentan  con un presupuesto de más de 2,6 millones de euros y un plazo de ejecución previsto de 12 meses. Pero aun no sabemos una fecha exacta del inicio de obras, por lo que los alumnos seguirán hacinados en este curso y sin todas las instalaciones adecuadas.

Esta licitación llega después de numerosas movilizaciones de la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) del centro, conocido como El Polvorón, por las condiciones del mismo. 

Esta actuación supondrá para el centro un avance importante si tenemos en cuenta que ya hay seis caracolas por falta de espacio. Las obras dotarán al centro de los espacios necesarios para albergar dos líneas de Educación Primaria con un total de 300 puestos escolares, que se sumarán a las tres líneas de Infantil ya creadas en la primera fase.

La Junta indica que con la ampliación el colegio tendrá capacidad para albergar hasta 525 alumnos y se podrán retirar las aulas prefabricadas, según la Junta. El colegio se habilitará como un B2, con zonas comunes, gimnasio y pista deportiva y se construirán 12 aulas de Primaria más, otras cuatro de pequeño grupo y una de educación especial, que incluirá un aseo adaptado con ducha y grúa de transferencia.

Asimismo, se creará un aula-gimnasio de 240 metros cuadrados, sala de usos múltiples, biblioteca, sala de recursos y aseos para el alumnado, además de un almacén general y un cuarto de limpieza y basura.

La primera fase de las obras para la puesta en marcha del colegio, que contó con una inversión de más de 2,2 millones de euros, concluyó julio de 2014. El centro que actualmente tiene capacidad para 225 niños, muchos menos de los que se necesitan.