Siete detenidos por robos con fuerza en establecimientos
Siete detenidos la mayoría de Mairena del Alcor y uno de ellos de Alcalá de Guadaíra a todos se les imputan más de 40 robos con fuerza en establecimientos.
Se les atribuyen presuntos delitos de Organización Criminal, Robos con fuerza en las casas, Contra la Salud Pública, Tenencia Ilícta de Armas, Robo de uso de vehículos, Falsedad Documental y Blanqueo de Capitales.
Los sietes detenidos son de nacionalidad española, I.A.G., de 36 años y vecino de Mairena del Alcor; A.A.G., de 33 y vecino de Sevilla; M.A.M.C., de 32 años y vecina de Mairena del Alcor; J.J.P.B., de 23 años y de Mairena del Alcor; J.M.D.G., de 27 años de Mairena; J.J.G.G., de 54 años y ambos vecinos de la barriada sevillana de Torreblanca, y J.J.M.C., de 36 años y vecino de Alcalá de Guadaíra.
Estos detenidos, aunque no se descarta que el número se eleve, han sido puestos a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº 1 de Estepa (Sevilla), que decretó el ingreso en prisión de cuatro de ellos.
Las investigaciones
Las investigaciones se iniciaron al detectar varios robos cometidos en establecimientos recreativos y hostelería en distintas localidades de la Sierra Sur de Sevilla y en los que se encontraban relacionados vehículos de gama alta.
Por todo ello, la Guardia Civil, según ha informado en un comunicado, estableció un dispositivo de control para identificar a los autores. Una vez identificados, solicitaron los oportunos mandamientos judiciales para los registros domiciliarios en Sevilla y provincia. En total realizaron diez registros y hallaron tres armas de fuego, dos armas cortas y una escopeta que sustraída hace cinco años. Todas las armas estaban preparadas para ser disparadas, con munición en la recamara.
Así, la Guardia Civil ha recuperado dos vehículos a motor sustraídos, uno de alta gama y gran cilindrada sustraído meses antes y con el que se cometían los hechos delictivos así como la recuperación de una motocicleta de alta cilindrada sustraída y con el número de bastidor manipulado para dificultad la labor de identificación de la misma. A
Además se ha incautado de dinero, joyas y numerosos objetos robados, entre ellos, ropa de deporte de diferentes marcas, bebidas alcohólicas y jamones procedentes de los robos en los establecimientos de hostelería, garrafas de aceite virgen extra, monturas de caballo, herramientas de diferentes marcas, trofeos de caza premiadas en diferentes campeonatos, incluido la cabeza de un ciervo ganadora de una medalla.
Tráfico de drogas
La organización criminal también se dedicaba supuestamente al tráfico de drogas, cultivando y vendiendo posteriormente grandes cantidades de marihuana. Además se encontraron en los registros 2.595,15 gramos de polen de hachís.
Según la Guardia Civil, estaban especializados en el robo de vehículos de alta gama tardando escasos minutos en clonar la llave con microchip y copiar el código del inmovilizador electrónico. En los registros fue localizado el dispositivo de clonación de las llaves de arranque de los vehículos, tales como kit de descodificación, los chips y el dispositivo OBD para la comunicación con el vehículo, así como varios juegos de mandos de llaves. Los agentes han aprehendido hasta 30 terminales de telefonía móvil y un número de líneas de teléfonos aún por determinar, siendo halladas 269 cajetillas de tabaco de contrabando.
También se han decomisado cinco vehículos pertenecientes a miembros de la organización, dos de ellos de alta gama y de gran cilindrada con un valor en el mercado de más de 100.000 euros.
La Guardia Civil ha resaltado que existía personal temporal para la comisión de los robos, a los que el líder de la organización criminal acudía cuando eran robos de gran envergadura y en la que hacía falta personal. Este personal temporal incluso eran individuos que están cumpliendo condena en centros penitenciarios y aprovechaban los permisos de cuatro o cinco días de los que disfrutaban para ir a cometer los delitos.
Dentro de la organización se ha observado durante la investigación que estaba perfectamente jerarquizada y estructurada. Guardaban fuertes medidas de seguridad, mediante acciones encubiertas o de ocultación, como el alquiler de vehículos legales de apoyo a nombre de terceras personas.