El cementerio estará en obras hasta el mes de abril
Llegan las demandadas obras del cementerio. Son trabajos de canalización de aguas pluviales, pavimentación, revestimiento y pintado de bloques de nichos, repaso de desniveles y mejora de la zona ajardinada. Todo ello tendrá un coste de 42.000 euros
Entre los objetivos de modernización están también criterios de eliminación de barreras arquitectónicas.
Las primeras tareas consisten en una red de evacuación de aguas pluviales mediante arquetas y una canalización de PVC para reconducir las aguas hasta la red general fuera del cementerio.
En cuanto a las mejoras en la pavimentación se seguirá la línea de las actuaciones ya realizadas. Una vez pavimentada la zona de entrada y la calle San José (lateral izquierda) en la anterior ejecución de obras, en esta segunda fase se pavimentarán las calles San Antonio (lateral derecho), la calle central paralela a ésta, la otra paralela a la calle San José y toda la calle Santa Teresa, que delimita el cementerio al fondo y que suponen las grandes vías del mismo.
De igual modo, se renovará el revestimiento exterior de los bloques de nichos, tapado de los huecos vacíos para mejorar la estética, pintado y remozado de fuentes y jardinería.
Esta es una segunda fase de las obras que se desarrollará hasta finales del mes de abril. En la tercera, para culminar en 2020, se acometerán intervenciones similares en otras calles interiores del recinto.
Plan de mantenimiento
Estas actuaciones más en profundidad se unen a las que la empresa realiza de forma permanente. Desde que la empresa Mémora Servicios Funerarios tomara la gestión del cementerio municipal en el año 2009 ha venido desarrollando un plan de mantenimiento interno. Incluye la limpieza que se divide por días de la semana de forma rotativa, y contempla desde pintura, acondicionamiento de nichos y de osario en general, jardinería, reparaciones, barrido y limpieza en profundidad de exteriores.
En la actualidad, el Cementerio de Alcalá cuenta con 1.200 nichos disponibles (14%) y una ocupación del 86%, es decir, 7.460 unidades y, conforme a la tendencia al alza, registra un descenso de las inhumaciones a favor de las incineraciones.